Aunque parezcan simples, los trabajos de diseño gráfico suelen ser el resultado de un proceso creativo largo y deliberado con muchas versiones intermedias. El cartel de la película El Resplandor (The Shining) no es una excepción. Stanley Kubrick y el legendario diseñador Saul Bass trabajaron en nada menos que 300 versiones antes de dar con la definitiva.
Bass es uno de los diseñadores gráficos más importantes de su época. No solo colaboró con maestros de Hollywood como Hitchcock o el propio Kubrik en storyboards y carteles. También fue el creador de logotipos para compañías como la operadora AT&T, o United Airlines. Pese a su genio, este diseñador de origen húngaro no lo tuvo nada fácil con el perfeccionismo de Kubrik. Este fue el cartel final de El Resplandor.
Y estos son algunos carteles de prueba. Sobre ellos pueden leerse anotaciones de puño y letra de Kubrik:
«La mano y la bicicleta son demasiado irrelevantes. El título se verá mal en pequeño. Parece que se le acabó la tinta cuando pasó por la zona más clara.»
«El laberinto y las figuras ponen demasiado énfasis en el laberinto. Creo que no deberíamos utilizar el laberinto para los anuncios. Título: ver #3.»
«No me gusta el dibujo. El hotel tiene un aspecto extraño, y el dibujo se pierde demasiado en el fondo. No es lo bastante compacto. En cuanto al logo, no me gustan los puntos. No lucirá bien en pequeño. Incluso a este tamaño es difícil de leer.»
Bajo estás líneas están las cartas con las que Bass presentó los dibujos a Kubrik. La firma del artista, hecha con un tampón de tinta, es espectacular (Bass en inglés significa lubina o róbalo. Es un pescado comestible). [vía The Fox is Black]