Las Coplas del Provincial constituyen un poema político-satírico castellano del siglo XV que ataca el reinado de Enrique IV de Castilla en forma de alegoría.

El ropaje alegórico de la crítica consiste en que el Provincial de una orden religiosa visita un monasterio (que representa a Castilla) y constata las depravaciones y corrupciones de los frailes y monjas del mismo.

El poema está emparentado con los otros dos máximos exponentes del género en el siglo XV (las Coplas de ¡Ay Panadera! y las Coplas de Mingo Revulgo). Como ellos ataca a la nobleza castellana de la época. Los personajes son citados por su nombre y tratados difamatoriamente sin piedad, con cinismo y con una brutal procacidad, lo que motivó fueran prohibidas por la Inquisición. Son acusaciones frecuentes la sodomía, los cuernos, el adulterio, la prostitución de las damas. Utiliza como estrofa 149 cuartetas y ha sido atribuido con escaso fundamento a Hernando del Pulgar, Alonso de Palencia, Antón de Montoro y Juan Hurtado de Mendoza. Otros han postulado que se trata de una obra colectiva de varios autores, que es la hipótesis más fundamentada y sostenida además de por Marcelino Menéndez Pelayo por Antonio Rodríguez Moñino y Kenneth R. Scholberg. López y Torrecilla, sin embargo, encuentran razones para atribuirlas a Hurtado de Mendoza.

1
El Provincial es llegado
A aquesta Corte Real,
De nuevos motes cargado,
Ganoso de decir mal:

2
Y en estos dichos se atreve,
Y si no, cúlpenle à él,
Si de diez veces las nueve
No diere en mitad del fiel.

3
Á Fr. Capitán mayor
Don Enrique de Castilla,
¿A cómo vale el ardor
que traéis en vuestra silla?

4
A Fr. Enrique Cañete,
Y Gonzalo de Luzón:
A Fr. Duque de Alburquerque,
Que es el mayor garañón.

5
Á Fr. Conde sin Condado,
Condestable sin provecho:
¿A cómo vale el derecho
De ser villano probado?

6
A oder y ser odido,
Y poder bien fornicar;
Y aunque me sea sabido,
No me pueden castigar.

7
A ti, Frayle mal christiano,
Que dexaste el monasterio,
¿Porqué haces adulterio
Con la muger de tu hermano?

8
Por haber generación
Que no se pierda el linage,
Ni se acabe, ni se baxe,
Por falta de algún bacón.

9
A ti Conde Cazcorrillo,
Renegador de Quaresma,
Que te dieron à Ledesma
Por labrar el mal hondillo.

10
Y es pública voz y fama
Que odiste personas tres,
A tu Amo y à tu Ama
Y à la hija del Marqués.

11
Odiste al Rey y à la Reyna,
Odes las tres Badajoces;
Y todo el mundo se espanta,
Cómo no odes à la Infanta.

12
Á vos Fr. Conde Real
Gran Señor de Benavente:
En venir secretamente
Nos hicistes mucho mal.

13
Diffamáis à la Abadesa,
Deshonráis à Benavides,
Y D.ª Aldonza de Mesa,
Porque sin verla os ides.

14
De Rivadeo Fr. Conde,
Que de Villandrando quedas,
Paga, paga las monedas,
Que verdad nunca se esconde.

15
Y aun me dixo una su tía,
Que lo diga y no lo calle,
Que estando en Fuenterrabía
Hicisteis bodas con Valle.

16
El de Roxas cuya es Cabia,
¿Conocéisle? decí hermanos;
Hombre de muy buena labia,
Mas no tiene pies ni manos.

17
Padre de hijos lozanos
El Rabí de Boticario,
De puesto de Castellanos,
Gallo expuesto en Campanario.

18
De Treviño Frayle y Conde
Manrique de Sandoval;
La verdad nunca se esconde,
Bien la sabe el Provincial.

19
Que de hoy más el escote
Podéis poner por reseña:
Hijo de la casta dueña,
No os podrán poner por mote.

20
¿A cómo vale Molina
El cuerno que te destroza?
A Fr. Duque de Medina,
Y à Fr. D.n Juan de Mdza.

21
Mal habláis Frayle Cucarro,
Muy alto y con mucho brío:
Hablemos de lo de barro,
Dexemos lo de Señorío.

22
A ti Frayle Bujarrón
Álvaro Pérez Oroçco
En la nariz te conozco
Ser de los de Faraón.

23
Y es tan grande que me asombra,
Y à los diablos del infierno;
Que hace en el verano sombra,
Y rabos hace en invierno.

24
Don Alonso ha de valer
Por malicioso y por malo,
Mas Don Jorge en el saber
Hijo es del Conde Lozano.

25
Provincial, así haya gozo,
Que parece este doncel,
Que es dispuesto para pozo
Para enfriar vino en él.

26
A Fr. Fernando ¿qué es dél?
De Silva, lleno de viento;
Que dexó nuestro Convento,
Por ser Frayle del Burdel.

27
No os podéis ya defender
Desnudo y deshacendado,
Y Cornudo amojonado
De parte de su muger.

28
Tente Frayle Carbonero,
Que contigo este Ministro
Viene à ser por el registro
Quien te sacó de Pechero.

29
Y manda el buen Provincial
Que no traygas más León,
Ni Águila, ni Cabrón,
Que es tu sangre natural.

30
Juan de Zúñiga es venido,
Aqueste Frayle perverso,
Jugador y del partido
Que no quiere ser converso.

31
Pues merece ser de Grados
Frayles, dadle la Corona,
Que es gran músico de ados
Gran Ladrón de su persona.

32
A ti, Frayle Adelantado,
Que desciendes de una Negra:
¿Por qué haces tal pecado
con la hermana de tu suegra?

33
No se haga de eso estima,
Pues el Prior de León
Sin tener dispensación
Hace bodas con su Prima.

34
A ti digo, mi Compadre
Don Alonso de Aguilar,
¿Cómo te puedes echar
con la hermana de tu Padre?

35
Muy bien Padre, aunque es mi tía,
Porque nuestro parentesco,
Aunque nuevo es muy fresco,
Por vía es de bastardía.

36
Pues así la cosa va,
Llamar quiero al dormitorio,
Y será à todos notorio.
Á Frayles ¿quién está allá?

37
Sodoma con Abirón
Y toda la Sodomía,
A Fr. Don Pedro Girón
Don Beltrán con su valía.

38
Veamos en este conclave
A Fr. Christóbal Platero,
Con tenazas, sello y llave
De todo falso minero.

39
Y diciendo el Provincial
Si queréis saber sus mañas,
A Dios en Cruz de metal
Él le rayó las entrañas.

40
Vengamos à poner cobro
A Don Albar Pérez Castro;
Que el Ministro halla por rastro,
Que da de contino à logro.

41
Que tras un su paramento
Le fue hallada cierta cuenta,
Que llevaba y mal contento
Por ciento, ciento y cincuenta.

42
A ti Fr. Diego Arias Puto,
Que eres y fuiste Judío;
Contigo no me disputo,
Que tienes gran señorío.

43
Águila, castillo y cruz,
Dime, ¿de dónde te viene?
Pues que tu Pila capuz
Nunca la tuvo ni tiene.

44
El Águila es de San Juan,
El castillo el de Emaús,
Y en Cruz pusiste à Jesús
Siendo yo allí capitán.

45
García, ¿está acá tu Padre?
¿A quién preguntáis por él?
A ti, que dice tu madre
Que eres hijo de Rusel:

46
Y aun jura Fr. Juan de Lerma,
Que estando de ti preñada,
Te bautizó con su esperma
El Prior de Mejorada.

47
¿Qué hacéis Don Frayle Mantilla,
Que de averso es vuestro nombre,
Que os tienen en esta villa
por mandil y no por hombre?

48
Trobador era Don Duelo
De la parte de su Abuela,
Y Don Abraán su Abuelo
Hizo coplas en cazuela.

49
Á Fr. Alonso de Torres,
Comendador de los Ayres,
¿A cómo valen donayres
que decís à los Señores?

50
A Fr. comer y beber
Que me dan por los decir;
Y tal Señor puede ser,
Que a Fr. algo de vestir.

51
Un Monge me ha dado cuenta,
De que es mal Frayle Contreras,
Y ha dormido muy deveras
Con D.ª Ana su parienta.

52
Y aun otra cosa he sabido,
Que no sé cómo la escriba,
Que hace bodas escondido
Con su hermana putativa.

53
A ti Fr. Rico de lanas,
Del convento buen hermano,
Quéxate de las Rufianas
Que tomaste de Arellano.

54
Una nueva me ha venido,
Y no más lexos que ayer,
Que te ode de contino
El que ode a tu muger.

55
A ti Frayle Pero Moro
De la casa de Guzmán,
¿Porqué cantas en el coro
Las leyes del Alcorán?

56
Dícenme que, siendo aun viva
Tu muger Doña Francisca,
Te casaste à la morisca
Con Doña Isabel de Oliva.

57
Provincial, quexas nos dan
De un hecho tan desabrido,
Que dexaste por olvido
Al buen Prior de San Juan.

58
Villano, no he de olvidar
Tu nefanda artillería,
Maestro muy singular
En la Santa sodomía.

59
A ti Fr. Cuco Mosquete
De cuernos Comendador,
¿Qué es tu ganancia mayor,
ser cornudo, ù alcahuete?

60
Así me perdone Dios,
(Y no lo digo por salva)
Que de entrambas cosas dos
He servido al Conde de Alva.

61
A ti Fr. Diego de Ayala
Marido de Doña Aldonza,
¿A cómo vale la onza
de cuerno? ¡Así Dios te vala!

62
A Fr. Don Juan de Mendoza,
Y al Señor Comendador,
Que me dan con grande honor
Miel, borra, pluma y coroza.

63
Gil González Bobadilla,
Aquí quedarás confuso,
Que andarás en esta villa
Con una rueca y un huso.

64
Porque ha jurado Contreras
A la muy Santa Cruzada,
Que nunca en burlas ni veras
Pusisteis mano à la espada.

65
Fray Alonso, de un gran mal
Os librad por cortesía,
Porque dice el Provincial
Que dos coplas os hacia:

66
La una de vuestro Padre,
Que quemaron en Toledo;
La otra de vuestra Madre,
Que es Puta de las de Olmedo.

67
Á Frayle Doctor Fiscal;
Ahora que viene el Rey,
Ha mandado el Provincial,
Que no os salgáis con la ley.

68
Y aun así me ayude Dios,
Que debéis salir ahora,
Que no habéis menester hora,
Pues ella misma sois vos.

69
Juan de Ulloa y Valdivieso,
Hombres cobardes y tristes,
De la batalla que hubistes
Resulta muy mal proceso.

70
Por el mundo va y se suena,
Ser aquesta, y no se calla,
Por quien dixo Juan de Mena,
La más que civil batalla.

Coplas del Provincial, anónimo, Siglo XV

71
En un hospital vi estar
Al rincón de una cocina
A Hernando el de Tovar
Con su capa y gabardina.

72
Es muy pobre, mas por eso
Muy ufano de hidalguía:
Y el Provincial le decia,
Que su Padre era confeso.

73
Fr. Pedro Méndez, hermano
Privado de Jeremías,
Dime tú ¿quánto darías
Por un quarto de Christiano?

74
Respondió de llano en llano:
Así goce de mis días,
Que es cornudo y muy villano
Quien hizo las coplas mías.

75
A ti Fr. Pedro de Llanos,
Puto malquisto de gente,
De linage de villanos
De sangrelluvia doliente:

76
Di à tu hermano por mi amor,
Que castigue su trasero
De tanto puto palmero
Como trae al rededor.

77
A Frayle que bien contrasta
Pero Álvarez de Palencia.
¿A cómo das la sentencia
Del conde de Santa Marta?

78
A precio que siempre queda
La condesa por abrigo
De enviarme paño y seda,
Y muchas cargas de trigo.

79
A ti Fr. Juan Baharí
Gran Pontífice mundario,
Rezador del Genesí
Mejor que del Kalendario:

80
Así yo de ti vea gozo,
Obispo talle de cuero,
Que te vi siendo más mozo.
Oficial de un cuchillero.

81
A Frayle Doctor de Castro,
El Ministro ha dicho aquí
Que os eligen por Rabí,
Y lo ha sacado por rastro:

82
Según hedéis à Judío
Habéis menester mandil,
Y rogarle al Alguacil
Por vuestro hijo y el mío.

83
Fr. Pedro de Bobadilla,
No os hagáis sordo ni mudo;
Que os tienen en esta villa
Por muy famoso cornudo:

84
Descendiente de Abacu,
Hebreo de masa d’uva,
Que hallaste rota la cuba,
Y por tapón una Q.

85
Bien lo sabe el Provincial,
Porque desde aqueste invierno
Yo el nuestro Mayoral
Andamos à toma el cuerno.

86
Fr. Pedro Méndez Christiano,
Mintió quien tal te decía;
Que él un quarto es de marrano,
Y los tres de sodomía.

87
Un Frayle me dixo anoche,
El nombre del quál te niego,
Que en el mesón de Pedroche
Fuiste novio de Don Diego.

88
En el Convento mayor
Y en la mesa Maestral,
Francisco Comendador
Ha causado mucho mal.

89
Que de cuernos no podéis
Levantaros con gran mengua:
Y al dar la mano decís,
Valedme Señora Menga.

90
A ti Frayle apañador
Canciller ¿quién fue tu madre?
Pues sabemos que tu padre
Fue un honrado labrador.

91
Puedes de su condición
Loarte bien con derecho,
Pues las monedas y pecho
Las pagabas sin pasión.

92
¿Quien les dio à los de Toledo
padres à Valdecorneja?
Ce, Deo gratias, hable quedo,
Y diréselo à la oreja.

93
A Hernán Álvarez primero
Dicen que se lo dio el Rey;
Que fue Rabino en su ley,
Y creyó en Dios verdadero.

94
Á Señor Pesquisidor,
El Provincial os avisa,
Que os dexéis de esta pesquisa,
Porque será vuestro honor.

95
Que por vida de la novia
Hermosa en el presumir,
Que son idos à Segovia
Por cosas para os decir.

96
Los de Segovia han llegado
Con las cosas que allá hallaron,
Y al Provincial admiraron
Luego que las han contado.

97
Proveyó en una sola,
Hasta mejor ordenar,
Que os castiguen en la cola,
Por vuestro mal rabear.

98
A ti, Diosa del deleyte,
Gran Señora de vasallos,
Dícenme que tienes callos
En el rostro del afeyte.

99
Y que vuestra Señoría
Tiene tres dientes postizos,
Que sabe mucho de hechizos,
Y estudia Nigromancía.

100
Decid, Señora Marquesa,
¿Cómo os va con el Marqués?
Más ha ya, Padre, de un mes
Que no he comido à su mesa.

101
No tengáis pena ninguna,
Que si el apetito inflama,
Ahí está D. Juan de Luna,
Que nunca os falta en la cama.

102
Doña Elvira de Pizaño,
La del rabo y ojo puto,
¿Por qué os quitasteis el luto
antes de cumplir el año?

103
Por casar con mi criado
El mi Page tan querido,
Que en vida de mi marido
Le tuve yo por velado.

104
Decid la Dama sin nombre
Por no ofender al Marqués,
¿A cómo vale el Valdrés
por falta de cuerpo de hombre?

105
A tres veces en el año,
Provincial, digo de honor,
Aindas con gran sudor,
O por fuerza ò por engaño.

106
Señora Doña María,
No estéis más en mi posada,
Que hedéis mucho à Judía,
Aunque vengáis perfumada.

107
Más, que dicen que tenéis
Unos humillos de Puta,
Que os hacen muy disoluta
Quando à vistas os ponéis.

108
Vos, Doña Isabel de Estrada,
Declaradme sin contienda,
Pues tenéis abierta tienda,
¿A cómo pagan de entrada?

109
Vaya Vuestra Reverencia
A Doña Inés Coronel,
Que se ha visto en el burdel
De la ciudad de Valencia.

110
Á Patrona de gran fama,
Pues pasó vuestro deporte,
Idos ya de aquesta corte,
Que sois vieja para Dama.

111
Por cierto, Padre, sí hiciera,
Pues no cortan mis tixeras;
Pero sirvo de tercera
A hijas y compañeras.

112
Dícenme, Doña María,
Que por hacer buena masa,
Se ha pasado à vuestra casa
Toda la Chancillería.

113
Castilla no lo consiente,
Aunque disimula el Rey,
Pues hacéis quebrar la ley
A su Nuncio Presidente.

114
Á vos, Doña Inés Mexía,
Más fría que los inviernos,
¿A cómo valen los cuernos,
Que ponéis à Don García?

115
Al precio de los de Hurtado,
Que le pone à su muger
Doña Sancha de Alcocer
Con un Frayle consagrado.

116
Dícenme Doña Leonor,
Que Doña Ana vuestra hija
Ha corrido la sortija
Con el nuestro Superior.

117
Que Don Sancho de Quiñones
Ha picado en su racimo,
Y Don Álvaro su Primo
Le rebusca los granzones.

118
Á Frayla Doña Mencía,
¡Cómo parecéis al Padre!
¡Bendita sea la Madre,
Que tales hijas paría!

119
Pues desde una hasta ciento
Nunca el cuerpo denegó,
Por igualar con el cuento
Que de su Madre heredó.

120
¿Qué buscáis decid, Doña Ana,
En aquesta Real Audiencia?
Vengo à oír la sentencia
Del pleyto de Doña Juana.

121
Y entre tanto que se da,
Ándome por esta Corte,
Por mi placer y deporte,
Y ver si alguien me querrá.

122
Doña María Sarabia,
Muger de Franco García,
¿A cómo vale la rabia
Que tenéis por la hidalguía?

123
A tres libras de albayalde
Asentadas en la tez,
Que pone la del Alcalde
Pedro Álvarez el Juez.

124
A ti Fr. Doña María,
Muger que fuiste de aquel
Que por la tinta y papel
Le llamaron Señoría.

125
Que feciste tales hechos,
Que nunca volviste espaldas,
Alzando siempre las faldas,
Y adargando con los pechos.

126
Doña María Manrique,
Respondedme à lo que os digo:
Si tenéis à Don Fadrique
Por Esposo, ù por Amigo.

127
Hablando, Padre, verdad,
Yo le tengo por Sayón;
Que à Vuestra Paternidad
Se lo digo en confesión.

128
Decid, Dama Cortesana,
Que estáis triste y querellosa,
¿Qué vida es ser Religiosa
para la que fue profana?

129
Preguntadlo, Provincial,
A Doña Isabel Girón,
Que dexa la Religión
Por seguir la Corte Real.

130
Doña Mayor de la Cueva
Dio mano de casamiento
A Don Álvaro Sarmiento,
Lo quál ella ahora niega.

131
Y aunque está depositada
Por mandado de la Reyna,
Don Enrique la despierna
En su celda consagrada.

132
Decidme, Doña Violante,
Perseguida de parientes,
¿Cómo os va con los presentes,
que os envía el Almirante?

133
Muy bien, Padre Guardián,
Pues con ellos hago salva
A toda la Casa de Alva,
Y al buen Prior Don Beltrán.

134
Por la Corte va y se suena,
Que es muy gran intercesora
Del Obispo de Zamora
Doña Constanza de Mena.

135
Muy mal oficio tomáis
Para ser Dama tan moza;
Desurdid lo que tramáis,
Y guardaos de una coroza.

136
Decidme, Doña Lucrecia
En el nombre y no en la fama,
¿A cómo vale el ser necia,
y fingir mucho de Dama?

137
Á Madama mi Leonor,
¿Qué hacéis tanto en Palacio,
quando estáis sola y despacio
con el Page y el Señor?

138
De vos, Doña Catalina,
Quiero dar una querella,
Porque andáis como Doncella,
Siendo ya Viexa mohína.

139
No tenéis Padre razón,
Pues anda Doña Teresa,
Que está más para la huesa,
Muy puesta de perfección.

140
¿Quien es la Dama afeytada,
A vos digo, Fr. Montero,
La de vuestro Tesorero,
que anda en vida embalsamada?

141
Valasme la Trinidad,
Que yo no caía en ella;
Esa es la que desuella
A Vuestra Paternidad.

142
Una nueva me ha venido,
Que Doña Isabel Hurtado
Encornuda à su marido
Con Don Pedro su cuñado.

143
Y à tener las bodas fue
En casa de la Sargenta:
No diré lo más que sé,
Porque es mucho si se cuenta.

144
Es ya común opinión,
Que Doña Ana de Guevara
Hace doblegar la vara
Al Alcalde Mondragón.

145
Y que tiene su deporte
Con Don Álvaro Pacheco:
Y en decirlo yo no peco,
Pues es público en la Corte.

146
Dícese entre Cortesanos
Por público y muy notorio,
Que Doña Francisca Osorio
Se acuesta con dos hermanos.

147
Y no la debéis culpar,
Pues lo hace según infiero,
Porque no falte heredero
A la casa de Aguilar.

148
Doña Aldonza de Valdés,
¿Quántas veces sois casada?
Con esta son, Padre, tres,
Y nunca me hice preñada.

149
De eso no me maravillo,
Porque entrando bien en quenta,
Pasáis ya de los cincuenta,
Y mudáis mucho caldillo

Coplas del Provincial, anónimo, Siglo XV