Hulk dirigida por Ang Lee, 2003

Hulk trata de qué diablos hacer con un tipo de buenas intenciones pero con un mal genio superlativo. Su única posibilidad de integración es aprender a ser el hombre más calmado del mundo, lo que visto lo visto no parece sencillo.

El mejor personaje, el padre de la «chica» (interpretado por Sam Elliott), se ve rodeado de sentimentalismo barato siendo el único que utiliza la lógica, teniendo claro desde el principio que debe acabar con Hulk y con su padre.

No parece muy comprensible la preocupación del padre de Hulk (interpretado por Nick Nolte, personaje iluminado al se le describe como representante de la Ciencia cuando en realidad es un trastornado mental… enfrente tiene a la abnegada novia -Jennifer Connelly- una ñoña que se dice científica) ya que con el «poder» que parece tener ¿para qué precisa el de su hijo?

Los enemigos de Hulk no están muy claros, aparte de su padre (que por causas desconocidas insiste en hacer piña con Hulk -¿para qué?-) y de una jauria de perros mutantes salidos de no se sabe dónde.

Hulk dirigida por Ang Lee, 2003

Eric Bana habría sido un gran Supermán… se equivocó de monstruo.