
“¡Cuán fácilmente nos perdonamos nuestras propias culpas cuando la fortuna nos las perdona!”.
“El buen uso de la libertad -trocado en el habito- se llama virtud, y su mal uso, vicio».
“La juventud, embriagada por las propias esperanzas, cree estar ya en posesión de aquello mismo que pretende; todo el producto de su imaginación se le antoja realidad».
“La política es un acto de equilibrio entre la gente que quiere entrar y aquellos que no quieren salir».
“El panteísta es un ateo disfrazado de Dios mismo».
“Cuando Dios borra, es que va a escribir algo».
«No es bueno que todo suceda como deseamos. Cuando todo nos sonríe en el mundo, nos apegamos a éste muy fácilmente y el encanto es muy fuerte. Por eso, y porque Dios nos ama, no permite que durmamos mucho y muy cómodamente en este lugar de destierro».

