Que pregunte la esfinge sus locos acertijos.
Yo contestaré siempre lo mismo:
que el mundo me ha dado
tan sólo virtudes frías y prudentes
pero que aquí dentro hay un hombre ardiendo
que no entiende sus propias respuestas y al que faltan vidas
para realizar tantas imaginaciones contrapuestas.
de El libro de las tentativas
(otros poemas de El libro de las tentativas)
