
Un tipo serio de Joel y Ethan Coen es la historia de Larry Gopnik (Michael Stuhlbarg), un judío de clase media en el medio-oeste americano durante la década de los sesenta. Un «hombre bueno» (o sea, un hombre iluso que vive al pie de la letra de acuerdo con las fantasías éticas relatadas por sus mayores) enfrentado, con tan pobres herramientas, a una terca realidad que insiste una y otra vez en no tener en cuenta la pobreza de medios de su religión.
Un idealista enzarzado en hacer frente a la contundencia del mundo con el bagaje de sus esquemas, al mismo tiempo que no acepta que el mundo no tiene porque tener en cuenta su idealismo.